Según el pensador turco-griego EPICURO, que nació el 341 antes de Cristo, cualquiera puede ser feliz, basta encontrar el camino correcto. Para Epicuro el camino correcto era SEXO, RISAS y BELLEZA. El placer era lo más importante en la vida (curiosamente no el dinero). Nadie debe sentir vergüenza por buscar el placer. Epicuro, decía que con un queso se puede hacer un banquete. También se puede ser feliz, comprando futilidades (cosas innecesarias) pero que no afecten a los demás. Es un tipo de Felicidad que Epicuro no recomienda. También, una persona puede ser feliz, cultivando AMIGOS que son una gran fuente de Felicidad; cultivando la LIBERTAD (los marxistas deben odiar esto) y teniendo una vida con SALUD y COMIDA en la mesa. Epicuro luchaba en contra del consumismo (los marxistas deben gustar de esto), pues decía que costaba un gran sacrificio mantener el dinero. La Felicidad puede ser barata! Basta apenas tener Amigos, Libertad y una Vida asegurada. Tres cosas fáciles de encontrar. El peor enemigo de la vida simple es la competición alimentada por la publicidad, por la propaganda de cosas no necesarias antes de ellas parecer entre nosotros. (Hoy alguien podría vivir sin teléfono celular? sin internet ? sin auto? sin TV?). Epícuro, hizo muchos seguidores en Grecia y en Turquía, uno de ellos de nombre Diógenes, hombre muy rico, de la ciudad turca de Enoanda, mandó imprimir en piedra en grandes blocos (hoy en suelo debido a los terremotos) , los principales pensamientos de este filósofo. De esta forma se puede saber casi todo de los pensamientos do Epícuro en los más de 300 libros que publicó e que ninguno sobrevivió hasta la actualidad. Uno dos pensamientos más fuertes de Epícuro es el hecho que “no basta leer una vez un pensamiento positivo, sino que hay que repetirlo muchas veces hasta que se quede en la cabeza”. (Los musulmanes adoptaron este pensamiento como obligatorio, para aprender el Corán). En resumen, Epícuro dice que “no es necesario ser rico para ser feliz” (hoy decimos “el dinero no trae la Felicidad, pero …”). Una sociedad rica hace uso de la publicidad para incrementar el consumismo; pero podemos usar la misma publicidad para enviar un recado “subliminar” a las personas, en sentido opuesto. Esta es una colaboración filosófica – para pensar – del Instituto Filosófico Internacional DEMOKRATIS (no marxista).