Vemos con frecuencia que muchos comentaristas políticos se auto-intitulan de “politólogos”. En rigor esta palabra identifica a los “especialistas, comentaristas, estudiosos e interesados en “Ciencias Políticas”. Los politólogos, son de dos tipos, los universitarios y los aficionados. Los dos son de igual valor, pero los universitarios, generalmente, saben que la palabra SOCIALISMO interpreta una filosofía que dice que los problemas de una sociedad cuando resueltos, resuelven los problemas individuales también. Lo contrario, no es siempre verdadero. Por ejemplo: “la salud y la educación públicas deben ser gratuitas y de la mejor calidad posible”. Esto resuelve los problemas relativos a este asunto, de todos los individuos. Este es un predicado SOCIALISTA. Lo contrario: “cada uno resuelve sus problemas de educación y salud con su dinero”. Según el anti-socialismo, esto resuelve los problemas de todos (lo que no es verdad). El ejemplo es bien claro y existen muchos más como este. Nada decimos sobre el tipo de gobierno en que el socialismo está inserido, si es una dictadura religiosa, fascista, marxista o una Democracia. Ser contra el socialismo es ser contra la educación y salud publicas gratuitas. Ahora, si colocamos una palabra a más al socialismo, sabemos que se trata de una dictadura o una Democracia. En los socialismos dictatoriales (marxistas, comunistas, religiosos, militares, populistas. etc.) el equilibrio y la paz de la sociedad se mantiene a punta de bala y, generalmente, con una tremenda injusticia social. Ya el Socialismo Democrático defiende la paz racional, la justicia social, la libertad y la Democracia, todo bajo el más profundo respeto a todo y a todos. No especificar el tipo de socialismo que estamos hablando, es medio peligroso, es como decir:” Krick tiene buenas ideas”. Se no especificar quien es Krick, nunca se sabrá si es hombre o mujer. Decir que el socialismo es malo, es medio nebuloso, porque no se sabe qué socialismo es ese. ¿¿Serán todos?? Pero si decimos que el socialismo marxista es pésimo, estamos afirmando una verdad incontestable y específica. Decir que es politólogo sin especificar el tipo de socialismo, es descubrir, ciertamente, qué tipo de politólogo es: culto o inculto. Destacamos que Karl Marx dijo que todos los socialismos no comunistas son una “FARSA”. Solo sabemos que él era un “FARSANTE”.