Muchos “inocentes” dicen que nosotros, los Trabajadores Socialistas Democráticos, somos muy duros con los comunistas. Afirmamos que apenas somos muy justos con ellos y respondemos a la misma altura con las mismas palabras. Como reconoció el desquiciado Karl Marx, ideólogo de los comunistas, el Socialismo Democrático no es adversario de los comunistas: somos simplemente enemigos. El hecho de ser enemigos de los comunistas, no nos hace “capitalistas salvajes” como ellos pretenden clasificar a todos los que se oponen al marxismo. Somos Trabajadores y con mucho orgullo. Sabemos que el Imperialismo Marxista pretende nos enjaular a todos en una dictadura comunista. Tenemos ODIO y ASCO de las dictaduras.